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Locales

Concluyeron las jornadas sobre drogadependencia

Este domingo concluyó el encuentro interparroquial sobre la problemática de la drogodependencia impulsado por el Grupo Santa Mónica, el cual contó con la presencia del Municipio de Río Grande, a través de la Dirección de Prevención y Asistencia Psicosocial en Adicciones de la Secretaría de Promoción Social.

Las dos jornadas se realizaron en el Centro Pastoral ‘Divina Misericordia’ sito en O’Higgins 751 del barrio AGP y en la apertura contó con la presencia del Obispo de Santa Cruz y Tierra del Fuego, Monseñor Miguel Ángel D’Annibale, la secretaria de Promoción Social, profesora Gabriela Castillo y de la directora de Prevención y Asistencia Psicosocial en Adicciones, licenciada Ana Andrade, además de la coordinadora de este grupo, Hermana Virginia Michel García y colaboradas como Myriam Francisquini y María Paz.

Las disertaciones estuvieron a cargo del licenciado Luis Suárez, integrante de la Comisión Nacional de la Pastoral de la Drogadependencia.

La licenciada Ana Andrade compartió que “venimos a acompañar las tareas que llevan adelante las hermanas en la ciudad; sabemos que es una temática muy compleja para que desde una sola área se puedan generar acciones y justamente las hermanas vienen realizando diferentes tareas, acompañando a las familias y desde el Municipio, en todo lo que podamos acompañar y estar siempre presentes, tienen nuestro compromiso”.

Agregó que “nos parece muy interesante que hayan preparado estas jornadas de dos días, junto con Monseñor D’Annibale, el disertante de la Comisión Nacional de la Pastoral de la Drogodependencia, Luis Suárez, esto generó grandes expectativas y nosotros como municipio nos sumamos al trabajo que vienen haciendo”.

Observó que “este trabajo tiene dos grandes líneas de acción, la parte espiritual y la parte profesional; aquí vemos muchas familias y jóvenes. Estos encuentros son muy importantes dentro de la rutina de trabajo que venimos haciendo también nosotros”.

La Hermana Virginia Michel García, por su parte, refirió que “tenemos en el Grupo Santa Mónica cuatro áreas de trabajo, una de ellas tiene que ver con los padres que tienen esta problemática, tenemos grupos para jóvenes, grupos también para personas adultas que tienen problemas de alcoholismo, gracias a Dios ya van tres años de trabajo y esto va creciendo”.

En ese sentido la religiosa confió que “cada vez hay más gente dispuesta a ayudar y en esto agradecemos profundamente a la Municipalidad porque siempre hemos tenido su apoyo, por ejemplo, cuando tenemos que derivar personas que ya vienen de una situación muy compleja y debemos derivarlas a Buenos Aires”.

En tanto Monseñor D’Annibale dijo que “la Iglesia diocesana de Río Gallegos, que abarca a las provincias de Santa Cruz y Tierra del Fuego, está comprometida desde hace mucho tiempo con este tema social y especialmente con el tema de la drogadependencia”.

“Nos tiene que sostener y levantar la esperanza este tipo de encuentros y estas actividades que se están realizando; el tema de la droga es muy difícil, muy complicado, los obispos argentinos han emitido muchos documentos; el último de estos documentos fue con motivo del Bicentenario de la Patria que vamos a celebrar el 9 de julio, donde también volvemos a hablar del narcotráfico y de las complicaciones que tiene el tema de la droga en la sociedad. Son temas muy serios”, dijo el Obispo diocesano.

Sostuvo que “somos conscientes que cada granito de arena que se puede aportar es muy importante en esto y no estamos solos y me alegra que esté la municipalidad y otros organismos estén sumados y digo que no estamos solos porque no debemos estarlo, los que están en el narcotráfico no están solos, es una gran organización que quiere destruir, que nos destruye a los jóvenes, que nos destruye a las familias, que nos destruye todo el camino que queremos recorrer”.

Monseñor D’Annibale dijo se refirió en su intervención ante los presentes sobre la parábola del buen samaritano y asimismo sobre la del leproso que Jesús curó. En ambas lecturas estuvo la decisión de quien se comprometió a ayudar y curar, a pesar que muchos le dieran la espalda a la situación y lo tomó como ejemplo para que los ciudadanos se comprometan en esta situación compleja de la droga.

Luis Suárez compartió “primero quiero agradecer a la ciudad por su invitación, vengo en nombre de la Comisión Nacional de Adicciones que está en el Episcopado argentino, la cual preside el padre Pepe Dipaola y venimos a acompañar, a brindar algunos conocimientos y experiencias que por ahí nosotros tenemos, pero por sobre todas las cosas de acompañar esta problemática que realmente es alarmante a lo largo de todo el país y que atraviesa todos los estratos sociales”.

El especialista observó que “esta problemática no conoce de fronteras, va destruyendo la familia, va destruyendo los tejidos sociales y va destruyendo a la sociedad toda”.

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